top of page

Nada


Por: Ángel Quiroga

Y si mi tristeza no fuese viento,

Y si ya mi voz no pudiera amar,

Si la luz fuese el por qué no soñar:

¡El amor no tendría paz ni aliento!

Ya mis besos no serían tiempo quieto,

Y ya no habría verso sin cantar,

¡Tu memoria no me podrá olvidar

Y jamás mi nombre será lamento!

Tu boca no será mi amuleto:

Boca y boca juntas sin reproche,

¡Mi futuro será arrepentimiento!

Ya sin paz y de ti hambriento,

Ahora solo somos de la noche,

Eres marchita flor que no ha muerto.

Marchita flor que el tiempo ha besado,

Marchita flor que llorar ha olvidado,

Marchita flor que ve dolor en su final;

El dolor del angustioso fin de tu boca contra la boca de la tierra,

De tus pétalos, que con angustia muerden la boca del sol.

Ya sin paz y de ti hambriento,

Tu boca es el amuleto que en el futuro ha muerto,

Que en la noche solo grita en silencio:

¡Tu amor es la profecía que la noche gime, que el día

lamenta, que el tiempo

acerca a su amanecer,

Al amanecer de la noche triste!

Y mis ojos tocan tu boca,

Y tu boca toca mi mente,

Y mi boca en lenta angustia se derrite calurosamente en el reflejo de tu ausencia.

La boca con temor se acerca a la boca,

El trueno se acerca a la tierra como el invierno a las flores,

¡Y latido a latido nuestros corazones gimen con la rabia de no estar cerca,

Cerquita, como la muerte a las flores,

como tu boca a mi boca

Y como la eternidad a la muerte!

Entradas recientes

Ver todo
La búsqueda del yo

Valentina Restrepo Amador 11°D El cuento escrito por Borges: “Undr” relata la historia de un personaje que, por estar huyendo, se...

 
 
 

Comentarios


bottom of page