PURGA DE UN AMOR

Por: Sofía Lichilín (Egresada)

El ideal estético de unos huesos

Que sobresalen del resto,

De unos ojos que miran,

De unas manos vacías,

O llenas de café.

De unos dedos que trazan líneas bajo textos incomprensibles;

No como los que yo leo,

Porque no huelen a incienso,

o a velas de menta;

Huelen a incendio de cerebros muertos.

El amor poético de esos ojos

Plasmados en un marco de color amapola

Sumado a las olas que aparecen en tu frente.

Aquellas que junto al incesante chapoteo

de tu boca en la soledad,

Delatan los vestigios de la centelleante tormenta

que discurre en tu mente.

Brillante destello de unos dientes y una argolla,

De un abrigo de cuello claro y una camisa abotonada,

Manchada por sonidos que despiertan mi alma

Y por volutas de humo que deshacen los sentidos.

Risa mía,

Tu locura, tus voces, tus peculiares ídolos

Sacados de los ecos

De un abismo sin razón.

Déjame crearte una constelación nueva,

Para que construyas figuras conmigo y sueñes en ella un sueño nuevo.

Déjame crearte un sitio en el abismo,

Donde no importe nada más que lo que compartamos

Y pueda hablar contigo sobre todas mis galaxias;

Donde el mundo se deshaga y pueda ponerte en palabras

Mis millas de pensamientos y mis besos muertos.

Quiero saber si allí no habrá límites,

Si podré liberar mis sentidos

Y explotar la fuga de desperdicios

de magnitudes universales

que tengo dentro.

Ayúdame a vivir,

Sálvame de esta muerte.

Prometo que el pozo de mis sentimientos es bello

Y que seguiré clamando por ti.

No dejaré de pensar en ti,

Voz de solo de jazz que ríe con sonoras notas,

Has de transformar el mundo en chocolate.